

El magnesio es un nutriente esencial para que nuestro cuerpo se mantenga sano. Ayuda regular la función de los músculos y el sistema nervioso, los niveles de azúcar en sangre y la presión sanguínea, tal y como se detalla en el National Institutes of Health.
La cantidad que se necesita de este mineral varía en función de la edad y el sexo. Un hombre adulto medio necesitará unos 400-420 gramos al día, mientras que una mujer unos 310-320 gramos.
El magnesio se encuentra naturalmente presente en estos alimentos: legumbres, nueces, semillas, cereales integrales, hortalizas de hojas verdes, leche, yogur y algunos productos lácteos. Hay muchas personas que consumen cantidades inferiores a las recomendadas de este nutriente y por ello deciden tomar suplementos dietéticos. No obstante, lo que estos usuarios deberían tener en cuenta son las contraindicaciones y efectos secundarios.
Su suplementación en exceso puede tener algunas contraindicaciones, como explican los expertos de Aldous, entre ellas: diarrea, náuseas, calambres abdominales y, en casos graves, arritmias cardíacas y paro respiratorio.
Aquellas personas con insuficiencia renal deberán tener especial cuidado, puesto que sus riñones puede excretar el exceso de magnesio, llevando a niveles tóxicos. Asimismo, este mineral puede interactuar con medicamentos como diuréticos, antibióticos y para la osteoporosis, afectando su efectividad e incrementando el riesgo de efectos secundarios.
Además, el superávit de este nutriente puede afectar al sistema neuromuscular, causando debilidad en los músculos, disminuyendo los reflejos y, en casos graves, llegar a la parálisis respiratoria. Los expertos insisten en que las personas con insuficiencia renal deberían consultar a un profesional de la salud antes de tomar suplementos de magnesio.
Contraindicaciones en personas con problemas en la salud cardiovascular
A pesar de que el magnesio sea crucial para la función cardíaca y mantener un buen estado de salud cardiovascular, tomar demasiado podría causar efectos como hipotensión o bradicardia.
En el caso de los pacientes de enfermedades tiroideas, consumir más cantidad de la necesaria de este nutriente, puede provocar que no se absorban otros minerales esenciales como el yodo y el calcio, necesario para la síntesis de las hormonas tiroideas.

A pesar de que lo normal es que todas las personas toleren bien el magnesio, es cierto que otras pueden llegar a experimentar efectos secundarios al superar la dosis recomendada, entre ellas:
- Malestar gastrointestinal: puede causar dolor estomacal, puesto que posee efecto laxante. Esto se puede reducir si se consume con una comida principal, como la comida o la cena.
- Baja presión arterial: como puede tener un efecto de relajación en los vasos sanguíneos, puede llevar a una ligera disminución de la presión arterial en algunos usuarios.
- Sensación de somnolencia: ciertas personas pueden sentirse con más sueño tras la ingesta.
Es importante saber que los suplementos de magnesio pueden llegar a interactuar con algunos medicamentos, entre ellos:
- Bisfosfonatos, empleados para la osteoporosis, no se absorben bien si se consumen sin que pase suficiente tiempo de la ingesta de suplementos o medicamentos con altas dosis de magnesio.
- Con los antibióticos puede llegar a ocurrir lo mismo. El magnesio podría provocar que no se absorban correctamente.
- Los diuréticos pueden aumentar o reducir la pérdida de magnesio a través de la orina.
- El uso prolongado de medicamentos recetados para el tratamiento del reflujo ácido o la úlcera péptica puede provocar niveles bajos de magnesio en la sangre.